No existe una sola respuesta a esta pregunta.
Sin duda, en el caso de muchos jóvenes, el consumo de alcohol
y otras drogas se inician en reacción a la presión
de los compañeros. Es natural que los jóvenes deseen
ser aceptados por sus amigos o compañeros
de clase.
Cualquiera sean las razones, el primer uso
de drogas puede ser muy peligroso. Las investigaciones demuestran
que una vez que se ha comenzado a consumir alcohol u otras drogas,
muy frecuentemente se sigue una secuencia predecible que conduce
a problemas derivados de su uso.
El uso de drogas ilícitas comienza
con el abuso de drogas legales: benzodiacepinas, anfetaminas, etc.
y el consumo de alcohol y tabaco. Mas de la mitad de los adolescentes
que consumen estas sustancias con el tiempo pasan a consumir otras
drogas ilícitas o combinaciones de drogas.
Por esta razón el alcohol, el tabaco
y la marihuana han sido denominadas "drogas de paso".
El uso de drogas como la cocaína es raro en personas que
no han consumido previamente alcohol, tabaco o marihuana.
La marihuana es una droga perjudicial para
la salud. Contiene mas agentes conocidos como productores de cáncer
que el cigarrillo común. Como los fumadores de marihuana
quieren mantener el humo en sus pulmones, un cigarrillo de marihuana
puede resultar tan dañino para los pulmones como cuatro de
tabaco.
Aún consumida en pequeñas dosis,
la marihuana puede afectar la función de la memoria, distorsionar
la capacidad de percepción, obstaculizar el juicio y reducir
la capacidad motora.
Lo más preocupante es la forma en
que la marihuana es utilizada actualmente por los niños y
adolescentes ya que afecta su desarrollo psicosocial
a corto y mediano plazo.
El primer uso de la marihuana produce cambios
en el estado de animo. Con el uso frecuente se observan síntomas
como:
- Perdida de ambición
- Perdida de eficacia
- Menor capacidad para concretar planes a largo plazo
- Dificultad de concentración
- Apatía
- Reducción en el rendimiento en la escuela y el trabajo.
Conducir un automóvil bajo los efectos
de la marihuana puede resultar sumamente peligroso, pues esta afecta
la capacidad de conducir por un periodo de por lo menos cuatro a
seis horas después de haber fumado un solo cigarrillo. Cuando
se la consume con alcohol afecta aun más la capacidad de
conducir.
El alcohol es una droga "psicoactiva"
dado que altera las facultades mentales de la persona que lo ingiere.
Puede alterar el estado de animo, originar
cambios corporales y crear dependencia. El alcohol es una droga
"depresora" porque deprime el sistema
nervioso central. Por ello el consumo exagerado de alcohol ocasiona
trastornos de coordinación, dificultad para el habla y perdida
de conciencia.
No es preciso que una persona sea alcohólica
para padecer problemas relacionados con el alcohol. Todos lo años,
muchos jóvenes pierden la vida en accidentes relacionados
con el alcohol (automovilístico, suicidios, etc.).
Puede ocurrir y de hecho ocurren muchos problemas
de salud antes de que los bebedores alcancen el estado de adicción
o uso crónico.
Algunas de las enfermedades graves asociadas
al consumo crónico de alcohol además del alcoholismo
incluyen:
- Cáncer de hígado, estómago, colon, mama, etc.
También ocasiona graves problemas
físicos:
- Afecciones de cerebro, páncreas y riñones.
- Hipertensión arterial, infarto de miocardio y accidentes cerebrovasculares.
- Hepatitis alcohólica y cirrosis.
- Impotencia e infertilidad.
- Defectos de nacimiento y síndrome alcohólico fetal cuyos efectos incluyen atraso mental, bajo peso al nacer, tamaño reducido de la cabeza y anormalidades en las extremidades.
- Envejecimiento prematuro y una cantidad de otros desórdenes, como una reducida inmunidad a las enfermedades, dificultad para dormir, dolores musculares y edema.
La cocaína es una de las drogas más
adictivas y puede producir la muerte.
Nadie puede predecir si se convertirá
en adicto o si la próxima dosis de cocaína será
mortal.
La cocaína puede aspirarse por la
nariz, fumarse o inyectarse.
La cocaína es un poderoso estimulante
del sistema nervioso central. Acelera el ritmo cardíaco y
al mismo tiempo estrecha los vasos sanguíneos, que procuran
absorber el flujo de sangre. Las pupilas se dilatan y se aumente
la temperatura y la presión arterial.
Estos cambios físicos pueden estar
acompañados de convulsiones, paro cardíaco, paro respiratorio
o hemorragias cerebrales o de otros órganos.
El consumo crónico puede producir
suficiente daño al tabique nasal como para ocasionar que
se perfore.
Las investigaciones han demostrado que la
cocaína actúa directamente sobre los llamados "centros
de placer" del cerebro. Estos centros de placer son
estructuras cerebrales que al estimularse producen un intenso deseo
de experimentar el afecto placentero una y otra vez. Ello origina
cambios en la actividad cerebral, y al permitir que la sustancia
química del cerebro llamada dopamina permanezca activa por
un periodo mayor que lo normal, estimula un fuerte deseo de consumir
más drogas.
Con frecuencia los usuarios experimentan
una sensación de inquietud, irritabilidad y ansiedad. La
cocaína también puede producir paranoia. Los usuarios
también experimentan depresión cuando
no consumen droga y en muchos casos vuelven a usarla para aliviar
dicho estado.
Además encuentran que necesitan mayores
cantidades con mayor frecuencia para generara el mismo nivel de
estímulo (tolerancia), situación que puede conducir
a la adicción.
Es bueno hablar de este tema para hacer reflexionar a las demas personas pero tienes que ponerle mas imagenes y alñinear el texto.
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